Hubo ocasiones en las que pudimos desayunar con nuestras licencias favoritas. Repasamos algunos cereales de videojuegos sorprendentes.
Ahora está de moda y muchos de nosotros desayunamos de forma muy sana, con nuestra frutita, ese bol de porridge… O incluso estamos los que no tenemos tiempo y vamos tirando con un cafecillo y un par de tostadas. Sin embargo, seguramente cambiaríamos nuestros hábitos mañaneros para meternos un buen tazón de cereales de videojuegos entre pecho y espalda.
Hoy en GuiltyBit te vamos a presentar algunas colaboraciones sorprendentes que existieron entre figuras emblemáticas de los videojuegos con algunas marcas de cereales famosas.
Cereales de Super Mario Bros
Una de las más conocidas fue la colaboración entre Kellog’s y Nintendo que nos brindó unos curiosos cereales del fontanero. Los mismos, compuestos de estrellas de miel combinados con crujientes que simulaban los objetos clásico de Super Mario, como los bloques con interrogantes o los champiñones rojos, no fueron un éxito que se diga.
Al parecer, su sabor era terrible, recordando a una mezcla entre limón y azúcares varios, lo que dinamitó su éxito y los hizo desparecer de las estanterías más rápido que Bowser cayendo de un puente a las llamas. La única forma de hacerse con una caja es mediante el mercado de segunda mano, ¿pagaríais cientos de euros por una caja de cereales? Nosotros desde luego que no, culpable.
Cereales de Pac-Man
En una época donde el merchandising no tenía límites, Namco vio bien aliarse con General Mills para producir una serie de cereales tematizados con Pac-Man. Así, en 1983, el gigante alimentario estadounidense sacó su primera tirada de los cereales Pac-Man, compuestos de bolas de azúcar (con la forma de los clásicos fantasmas de la licencia) rellenas de chicle. Sí, no es broma, tenían chicle por dentro.
Aunque para un desayuno suena chungo de narices, este estrambótico experimento tuvo éxito y pudo mantenerse en las tiendas de Estados Unidos hasta 1985, donde finalmente fueron retirados por aburrimiento de los comensales.
Cereales de Sonic The Hedgehog
¿Quién no recuerda lo rico que estaban los Cheerios? Esos anillos de miel estaban de rechupete y solo de pensar en ellos convierten mi boca en agua. Pues ahora imaginaos el éxtasis que supone el conocer la existencia de una tirada de cereales de Cheerios tematizados con el erizo azul de SEGA.
Aunque los cereales en sí no tenían nada propiamente dicho de Sonic, las cajas llegaron tematizadas con figuras del erizo y esbozando su color azul característico. La idea partió de SEGA como un acuerdo de colaboración con el que promocionar a SEGA Génesis en Estados Unidos, incluyendo dentro de cada paquete trucos para sus juegos, sorteos de mechandising como camisetas y otras curiosidades.
Al día de hoy, Generals Mils nos presenta su propia tirada, con anillos simulando los del videojuego y figuras de azúcar con los objetos diferentes que debe recoger Sonic. Se lanzaron para promocionar la segunda película, actualmente vigente en los cines.
Cereales de Pokémon
A inicios del año 2000, Nintendo volvió a abofetearnos con una nueva colaboración para desayunos. Pokémon estaba arrasando y la industria alimentaria quería su parte del pastel. Por ello, Nintendo y Kellog’s se aliaron para traernos los cereales oficiales de Pokémon, con una caja muy molona esbozando un rótulo brillante y donde figuraban las criaturas más características de la primera y segunda generación.
Su atractivo visual fue suficiente para que causase furor y la gente se pelease por ellos las primeras semanas. En cuanto al contenido, no dejaban de ser los típicos aros de azúcar acompañados por figuritas de colores que buscaban simular las formas de algunos pokémon (aunque vagamente).
Aunque su comercialización al por mayor hace años que cesó, todavía pueden encontrarse cajas a la venta en establecimientos especializados e incluso Amazon.
Cereales de Minecraft
Si Fortnite no tiene cereales es porque Minecraft le comió la tostada. Hace dos años Kellog’s volvió a sorprender con una tirada comercial de cereales basados en esta popular franquicia. Minecraft Creeper Crunch es como se les conocía y nos traía en su interior cereales bañados en canela sumado a unos cubos verdes, que imitaban a los creepers del videojuego, de azúcar y sabor a frutas.
El resultado gustó a los comensales, cuyas críticas fueron positivas (algo raro de ver en cereales de videojuegos) y que tuvieron un éxito arrollador debido a que incluían códigos para desbloquear objetos estéticos en el videojuego. Se vendían en varios formatos, siendo el familiar uno de los más solicitados. Al día de hoy puedes hacerte con cualquiera de los formatos vía Amazon.
Estos son solo algunos ejemplos de cereales de videojuegos, culpable
En la historia de nuestro medio hay más colaboraciones histriónicas de cereales y videojuegos, incluso de otras franquicias fuera de nuestro arte, como series animadas e incluso cómics. Nosotros desde luego que nos molaría que se siguiese apostando por estas curiosidades, ¿os imagináis a Cardona comiendo unos cereales de Shenmue o Tekken?