En este análisis de RUSH a Disney Pixar Adventure os comentamos si las posibilidades de Xbox One X son motivo suficiente para justificar esta reaparición.
Porque en este caso, el análisis de RUSH a Disney Pixar Adventure hemos querido focalizarlo en las mejoras que aporta la nueva bestia de Microsoft y la ausencia prácticamente asegurada de Kinect, y por ende, el aprovechamiento del mando.
En líneas generales, un juego que ya era colorido y preciosista en su aparición, solo puede continuar siéndolo en Xbox One X. Lo que también se mantiene es la ausencia de dificultad, algo por otro lado comprensible.
El parque Pixar
Antes de comenzar la aventura, RUSH a Disney Pixar Adventure nos pregunta si queremos utilizar Kinect o el mando. Para aquellos valientes (como yo) que utilizan el dispositivo en pleno 2017, decir que a partir de ese momento podemos olvidarnos de todo y disfrutar de la experiencia, porque Kinect se encarga prácticamente de todo, hasta de crear a nuestro avatar .
Si por contra usamos el mando, la experiencia no va a ser mucho más complicada, pero tendremos que estrujarnos un poco más el cerebro pulsando unos pocos botones, porque la victoria está prácticamente asegurada.
En el editor podemos crear nuestro personaje, un niño/a al que podremos añadir una vestimenta básica y lanzarlo a la aventura. Un taxi nos lleva a Parque Pixar donde nos esperan seis patios de recreo tematizados con las películas Toy Story, Cars, Buscando a Nemo, Los Increíbles, Up y Ratatouille.
Misiones y más misiones
Cada mundo comienza con una misión básica y se va enredando en sucesivos escenarios. Bien manejemos a los personajes, bien vayamos sobre raíles, la experiencia es tan satisfactoria como sencilla. Parece que el juego fue concebido para realizar movimientos frente a Kinect, y el mando solo logra recortar dificultad a algo muy simple de por si.
Las misiones son diferentes escenarios de las películas Disney/Pixar que todos conocemos. Lo bueno es que podremos afrontarlas en cooperativo junto a un amigo. En su desarrollo podremos recoletar monedas, y una vez acabadas, desbloquear tanto nuevas misiones como personajes jugables.
No hay diferencia entre manejar al niño avatar y a los personajes de las películas, más allá de las habilidades que éstos pudiesen tener. El movimiento de estos personajes es tosco y el planteamiento de las misiones puede llegar a hacerse aburrido y monótono.
Potencia sin Kinect
Gráficamente, el juego ha sido mejorado para aprovechar el 4K y el HDR que brinda la nueva consola de Microsoft. No estamos ante un juego gráficamente corto, si no ante una experiencia agradable de ver. No en vano, los diseños y modelados son sencillos, sin grandes alardes. No olvidemos que estamos ante un juego que salió en 360.
El sonido no flaquea, y aunque los doblajes introductorios no tienen alma, las voces de los personajes de las diferentes películas jugarán con nuestra nostalgia.
Análisis de RUSH a Disney Pixar Adventure, conclusiones
Rush a Disney Pixar Adventure es un juego que gráfica y auditivamente, cumple. Pensado para Kinect, no lo echaremos en falta con un mando en la mano. Es una experiencia de dificultad prácticamente nula, pero con la que pasar un rato agradable.