Color Zen es un conocido juego de puzzle que causó furor en Wii U en su lanzamiento. Con una jugabilidad muy simple consiguió enganchar a miles de personas. Los motivos fueron varios, aunque sin duda lo que más destacaba era su música relajante de estilo chill-out. Al contrario que otros puzzles que pueden llegar a estresarnos por su dificultad, Color Zen nos relajaba y nos invitaba a seguir intentándolo sin ponernos de los nervios y sin tener ganas de lanzar la consola por la ventana.
Color Zen Kids sigue la esencia del anterior, en el que tenemos que unir las piezas del mismo color que se encuentran diseminadas por toda la pantalla con una música relajante de fondo. La novedad es que ahora los más pequeños de la casa podrán jugar también, ya que está recomendado a partir de los 3 años de edad. Aunque tenga ese nombre, ya aclaran que es un juego que los adultos también disfrutaran, solo que simplemente se han añadido formas más infantiles y se ha simplicado un poco para que pueda jugar toda la familia.
El título está desarrollado por Large Animal Games, estudio indie que se encuentra detrás de la saga y dedicado en general a desarrollar juegos para iOS, Android y Web. Esto explicaría algunos de los defectos más alarmantes del juego.
Color Zen Kids es un juego digital descargable en le eShop de Nintendo y además es bastante barato, por lo que era de esperar que no durase horas y horas. Pero tampoco es normal que valga prácticamente lo mismo que el Color Zen original y tenga menos de la mitad de los puzzles de este. La diferencia es alarmante, ya que el primer juego contenía 460 pantallas y este apenas tiene 100. Esto hace que se haga cortísimo, ya que a no ser que decidas hacer un par de puzzles al día, en media hora lo tienes acabado. En este aspecto es bastante decepcionante, y más valiendo como el original.
Lo más gracioso de todo es que el mismo juego se ha publicado para iOS y Android por menos precio, así que sí lo único que nos interesa es unir formas del mismo color mientras vamos en el autobús o el metro, casi vale la pena comprarlo en el móvil y ahorrarnos un dinerillo.
En cuanto a la dificultad, Color Zen Kids es más fácil que el original, eso está claro, hay muchos niveles que pueden pasarse en un segundo pero hay otros que se resisten y cuesta un poco más averiguar como vamos a unir todos los colores. Por eso sigue siendo un juego que los adultos podrán disfrutar tanto o más que los niños.
Los gráficos son muy coloridos, con formas abstractas y de animales que son bastante agradables a la vista. En la pantalla superior de la Nintendo 3DS solo se ve el logo del juego, mientras que toda la acción ocurre en la pantalla táctil. Siempre hablamos del desaprovechamiento de la pantalla táctil de la consola, pero en este caso es al revés, ya que han pasado olímpicamente de la superior y esta podría haber dado más juego.
Como ya hemos comentado, la música chill out del juego es bastante relajante y es un gran acierto del juego, ya que ir resolviendo los puzzles escuchándola te hace entrar casi en un estado zen (de ahí el nombre de la saga, no hace falta ser un genio para deducirlo).
En definitiva, Color Zen Kids es un buen entretenimiento para toda la familia que disfrutarán tanto niños como adultos, pero está claro que podrían haberse currado unos cuantos niveles más y que deja un sabor bastante agridulce. Sí, es entretenido a la vez que relajante y algunos niveles pueden ponerte a prueba, pero da la sensación de que algo falta.
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