He estado de vacaciones durante la última semana, y mi firme propósito era aislarme de todo. La verdad es que lo he conseguido, excepto por una noticia que, de tanto que sonó, acabó llegando a mis oídos; EA había empezado a cobrar por las demos en Xbox One. El acabose.
La medida, que olía a globo sonda cual reforma del PP a kilómetros de distancia, parece haberse solucionado por fin, y Electronic Arts achaca este suceso a un desafortunado error técnico. La filial británica de la desarrolladora, ha emitido esta breve y escueta nota al respecto:
El precio asociado a las demos de UFC 14 y FIFA 14 se debieron a un error. Ambas demos ya han sido arregladas en la tienda de Microsoft.
EA no ha dicho nada sobre un posible reembolso, en caso de que algún pardillo usuario despistado haya pagado por ellas. La verdad es que todo este asunto ha sonado, como decía al principio de la noticia, al típico «a ver qué pasa», al que tan acostumbrados nos tienen políticos y organismos públicos.
Tal y como está el cotarro gracias a DLC, micropagos y demás milongas, la verdad es que, lamentablemente, la noticia nos había indignado, pero no nos había sorprendido. Sea como fuere, podremos seguir probando los juegos gratuitamente. Ya tendrán tiempo de sangrarnos cuando decidamos adquirirlo. ¿Habrías pagado tú por una demo?