DirectX 12, la nueva API de Microsoft para Windows 10, no requerirá de una nueva tarjeta para disfrutar de esa mejora de rendimiento que nos ha vendido la compañía americana estos últimos días. De todas formas, apuntan, que para aprovechar al máximo todas las funcionalidades de DirectX 12 si que tendremos que hacernos con una tarjeta gráfica diseñada para esta API.
Microsoft emitía un comunicado en el que explicaba que modelos actuales serán compatibles, al menos, con el núcleo de DirectX 12:
A raíz de la reciente demostración de Microsoft de algunas de las experiencias de juego que ofrecerá Windows 10 con la tecnología DirectX 12, algunas personas han preguntado qué hardware específico soportará esta API. Aunque no estamos preparados para dar todos los detalles acerca de DirectX 12, sí podemos anunciar que estamos trabajando de manera muy cercana con nuestros socios de hardware para que el hardware del PC Gaming más actual funcione bien con DirectX 12, lo que incluye: GPUs NVIDIA Maxwell, Kepler, Fermi, procesadores Intel de cuarta generación en adelante y GPUs basadas en AMD GCN. Tendremos más detalles que compartir en la próxima GDC de marzo.
El quid de la cuestión radica en la siguiente afirmación de Microsoft:
Habrá tarjetas con DirectX 11 que se aprovechan de una gran parte del controlador y el software de alta tecnología que estamos trayendo en Windows 10, pero si quieres los beneficios de DirectX 12, vas a necesitar una tarjeta DirectX 12.
Veremos finalmente cuanta mejora de rendimiento se consigue obtener en tarjetas actuales y cuanta en las futuras tarjetas pensadas para esta nueva API, que llegará también a Windows Phone y Xbox One, aunque Microsoft ha afirmado que en estas plataformas la mejora de rendimiento no tendrá, ni de lejos, el mismo resultado que en PC.
Vía: Polygon.