El miedo se respiraba en la sala, pero Sony ha sabido darnos ese respiro que todos queríamos con unas palabras muy dirigidas a Microsoft y, sobre todo, a Xbox One ya que ha barrido de un plumazo todo aquello que criticábamos a la compañía americana.
PlayStation 4 no nos obligará a estar conectados a internet (haciendo referencia a las 24 horas ya míticas de Xbox One). No tendrá ningún tipo de restricción en los juegos, es decir, que podremos venderlos, dejárselos a nuestros amigos, conservarlos y, además, jugarlo en una consola de otro país ya que será de región libre.
Vamos, ¿queréis quejaros? Pues ale, iros a la conferencia de Microsoft.