A pesar de lo que puede dar a entender al leer su título, Inferno Climber no se trata de una secuela del clásico Ice Climber con un entorno totalmente opuesto, sino que estamos ante lo nuevo de Arc System Works, nombre que os sonará de la saga Guilty Gear o BlazBlue. En esta ocasión, los japoneses han decidido dejar a un lado el género de la lucha para centrarse en una aventura que logra llevarnos a la época de PlayStation y Nintendo 64 debido al aire que desprende, aunque con un toque más adulto que el de sus referencias.
Ya de primeras Inferno Climber comienza de forma llamativa, y es que tras narrarnos los inicios de nuestro personaje nos vemos frente a su némesis de turno que le separa de su ansiada meta. Eso sí, la cosa dura poco, ya que en un abrir y cerrar de ojos vemos cómo somos asesinados, por lo que la cosa llega a su fin antes de lo esperado… O al menos debería ser así, ya que un misterioso ente nos resucita, empezando así este nuevo comienzo.
Al principio mencionaba que este juego recuerda a los títulos de hace 3 generaciones, siendo el motivo de este flashback su estilo de aventura 3D al más puro estilo Ocarina of Time, de forma que la exploración de mapeos para encontrar objetos es el pan de cada día en Inferno Climber. Es más, el homenaje a la epopeya de Link no termina aquí, y es que nuestro héroe también tiene el objetivo de reunir una serie de objetos para restaurar la paz y la estabilidad a su reino, siendo su Trifuerza las cinco Piedras del Purgatorio.
A parte de esto el juego no tiene mucho más misterios, ya que recoge las habituales mecánicas de los RPG de selección de clase del personaje, equipamiento de armas, recolección de objetos de salud, e incluso la historia bebe del género presentándonos una epopeya más profunda de lo que en un principio pueda parecer. Eso sí, a todo esto hay que añadirle una dificultad varios pasos más exigente de la habitual, ya que los enemigos castigan con bastante fiereza los despistes, sobre todo los jefes finales, donde toca lucir habilidades de esquive.
Cabe destacar que Inferno Climber está orientado para ser jugado con mando, algo prácticamente obligatorio si tenemos en cuenta que los controles con teclado y ratón están tan distribuidos que requieren que o bien usemos el pie como apoyo o que andemos cambiando de posición nuestras manos cada dos por tres, algo que esperemos se cambien una vez esté publicada la versión completa.
Inferno Climber promete dar bastante de que hablar, sobre todo para todos aquellos que hemos jugado a las aventuras que tan buenos recuerdos nos traen de la quinta generación de consolas, por lo que si sois también parte de este grupo no le perdáis la vista a este título. Eso sí, si no podéis esperar sabed que el juego se encuentra en acceso anticipado en Steam, aunque tened en cuenta que todavía tiene aspectos por pulir.