Nanatsu no Taizai 2×02 le da un giro inesperado a la situación. De pronto estamos en un capítulo tranquilo y de pronto se tuerce todo en un momento. C’est la vie.
El episodio de esta semana apuntaba, desde el principio, a ser algo más tranquilo que el primero. Sin embargo, Nanatsu no Taizai 2×02 ha acabado liándola bien parda. Y no solamente por los nuevos enemigos a los que nos enfrentamos.
Desde luego ha sido un curioso golpe de efecto que se suma a la situación personal de los protagonistas. Algo que, personalmente, veo un pelín forzado, sinceramente.
No es oro todo lo que reluce
Ni qué decir tiene que los componentes de los Pecados Capitales no son trigo limpio. Cada cual está más loco que el anterior. Y si hay uno que destaca por no tener ni zorra de por dónde nos va a salir es, sin duda, Gowther.
Este personaje, desde que aparece, se ve que está como una cabra. Bueno, perdón, pobres cabras. Más bien es que no tiene por dónde cogerlo. Es cierto que Meliodas confía plenamente en sus colegas, pero lo de este tí no tiene desperdicio.
El ejemplo más claro es lo que acabamos viendo hoy y que da respuesta tanto al final de la temporada pasada como al principio de esta. Y, sinceramente, es lo más escabroso que me he podido echar a la cara en mucho tiempo.
Sin embargo, sí que da la sensación de que esa última parte ha ido, quizás, demasiado rápido. Se han centrado mucho en contarnos la parte «sentimental» para darle un toque y un final épico al asunto.
Merlín aún tiene mucho que decir al respecto. Al igual que Meliodas. Así que, esperemos a ver qué nos cuentan la semana que viene.
Los amores de nuestras chicas
La primera temporada nos dejo un par de cosas bien claras en cuanto a amoríos. La primera es que Meliodas y Elizabeth están colados el uno por el otro. La segunda es que King y Diane tienen mucho por lo que ponerse al día.
Pero cual culebrón de las tres de la tarde o capítulo típico de Física o Química, las conclusiones llegan cuando no es posible dar una respuesta. Cuando no tienen a su «amor» al lado para decirle lo que se siente, vaya. Y en el caso de que no sea así, justo en ese momento pasa algo chungo y hay que aplazar la «charla».
Esto, sumado al tema de «no quiero que vengas para protegerte» es una cosa que me molesta mucho últimamente. Entiendo algunas situaciones, pero estas me han parecido, otra vez, muy forzadas y demasiado típicas. Mira que hay situaciones que se pueden dar para meter culebrones de por medio. Pero no, usamos siempre las mismas.
Soy un romántico, y cuanto antes acaben juntos, para mi mejor. Sobre todo si los amoríos se alargan más un chicle de 20 euros. No hay derecho a ello.
Un buen ritmo
No os equivoqueis. No estoy criticando la serie en general, solo algunas situaciones en particular que me parecen muy tontas y absurdas. El elemento de Gowther y su locura me ha parecido un cambio de guión muy bestia. Al igual que la rapidez con la que han llegado al bosque de las hadas.
Sin embargo hay cosas que se precipitan demasiado. Por suerte, una vez las aceptas (como los Den Den Mushi en One Piece) parece que todo lo demás coge sentido.
Nanatsu No Taizai sigue en la misma tónica que su anterior temporada. Sorprende tanto para bien, en la mayoría de los casos, como para mal, en algún que otro punto.
Así que, veamos a ver cómo calman y hacen entrar en razón a Gowther. Y qué pasa con el trio lalalá que se ha ido de juerga al Bosque de las Hadas.