La adaptación al cine del aclamado videojuego de Naughty Dog tiene problemas. La producción de The Last of Us está atascada en estos momentos y parece que va para largo.
El propio productor de la película, Sam Raimi (Posesión Infernal, Spider-Man, Darkman, etc…) no ha tenido reparos en comentar que la adaptación de The Last of Us está atascada en este momento. «No tengo el poder para hacer que avance», ha comentado Raimi.
La producción de esta película fue anunciada allá por 2014, siendo una producción de Screen Gems. El guión de The Last of Us estaba a cargo de Neil Druckmann, director creativo del videojuego de PlayStation 3 (y posteriormente PlayStation 4), que también ejerce de productor junto a Sam Raimi (y su compañía Ghost House Pictures), los presidentes de Naughty Dog, Evan Wells y Christophe Balestra y el director del juego Bruce Straley.
Desde su anuncio hace ya dos años, son pocas las noticias sobre dicha película. En su momento se rumoreó que Maisie Williams, la Arya Stark de Juego de Tronos, estaba interesada en encarnar a Ellie, con un Neil Drukmann que en ese momento comentó que la película iba a presentar «grandes cambios» respecto a lo visto en el videojuego.
En una entrevista con IGN allá por abril de este año, Druckman comentó lo sieguiente: «Sé que dije en una entrevista hace un tiempo que tuvimos una lectura del guión, con un texto que llevaba a buen puerto y eso condujo a una especie de infernal proceso de desarrollo, como suele ocurrir con estas cosas… No se ha hecho ninguna clase de progreso desde hace un año y medio.»
Al preguntar a Raimi sobre las palabras de Druckmann y el estado de desarrollo de la película, el productor explicó había un problema relacionado con los derechos entre Neil Drukmann, Ghost House Pictures y Sony, teniendo Druckmann y Sony las mismas intenciones inicialmente. «Mi compañía no tiene los derechos de The Last of Us, así que no puedo hacer mucho. A pesar de que yo soy uno de los productores que él (Druckman) preparó para la película, vendió los derechos a Sony, que me contrató como productor por casualidad y no puedo hacer nada con los derechos, así que no estoy en el asiento del conductor, no puedo decir que decidirán entre Sony y Neil. Si ellos deciden mover el proyecto adelante estaré encantado de ayudarles de nuevo.»
Raimi seguiría interesado en participar en la película a pesar de los retrasos y los mareos de derechos y licencias: «Sí, sigo interesado en ello. No estoy del todo seguro de lo que ello implica. Ahora mismo se basa en esperar sentados. No quieren seguir adelante, y no es competencia mía decir por qué, y Neil, creo, está en desacuerdo con ellos sobre cómo las cosas deberían funcionar, por ello la producción está astascada. Yo no tengo el poder para moverlo.»
Parece que la cosa va para largo, culpables. Clásicas diferencias creativas entre productores, directores, guionistas y compañías, unos quieren hacer las cosas de la manera que creen adecuada al proyecto y otros quieren rentabilidad y beneficios. Va para largo…