Uno de los rodajes más complicados de los últimos tiempos ha llegado a su fin. La película de Han Solo ha anunciado la conclusión de la producción y ha anunciado además su título definitivo. Se acaba el suplicio.
Solo: Una historia de Star Wars es el título definitivo del tortuoso spin-off de Han Solo. El accidentado rodaje ha llegado a su conclusión y ya todos pueden respirar tranquilos. Al menos hasta el estreno de la película, que puede ser un nuevo calvario para Lucasfilm a poco que la película no cumpla las expectativas. El encargado de dar la noticia ha sido el propio director, Ron Howard, en Twitter.
En Guiltybit os hemos ido detallando los paso que ha dado la producción. La elección del actor Alden Ehrenreich ya supuso cierto interés al tratarse prácticamente de un desconocido. Todo se apagó rápidamente. La tónica general de la franquicia ha sido siempre la de seleccionar actores similares para sus papeles principales. Salvo excepciones, los personajes protagonistas siempre han sido interpretados por intérpretes semidesconocidos.
Sin embargo, al haber contado con un plantel lleno de actores más o menos consagrados para Rogue One, se esperaba que ocurriera algo similar en Solo. En realidad se consigue a medias, ya que en el reparto hay nombres como Emilia Clarke, Donald Glover o Woody Harrelson, que sí son bastante más conocidos.
Hey #Twitterville we just wrapped production so here’s a special message #StarWars pic.twitter.com/8QJqN5BGxr
— Ron Howard (@RealRonHoward) 17 de octubre de 2017
Lucasfilm despidió a los directores originales en pleno rodaje
Pero el actor principal no fue ni muchos menos un problema para nadie. Se aceptó y se juzgará en su momento, cuando la película llegue a las salas. La sorpresa saltó cuando en pleno rodaje se conoció el despido de los dos directores originales. Phil Lord y Christopher Miller salieron por diferencias creativos con Lucasfilm. La alarma sonó fuertemente en todos los estudios Disney. A las pocas semanas se volvió al trabajo y para ello se contrató al veterano Ron Howard, que al parecer ha realizado grandes retoques.
El rodaje de Rogue One: Una historia de Star Wars, el primer spin-off galáctico, fue menos accidentado, al menos de cara al público, y terminó con grandes cambios en el planteamiento final de la historia. En resumen: el resultado final se vio perjudicado por los problemas en el rodaje y en el montaje. La historia podría repetirse, de manera voluptuosa, en Solo: Una historia de Star Wars. Contando además que estamos hablando de uno de los personajes más queridos de todo el universo de La guerra de las galaxias.