Apenas diez días después del lanzamiento de la mini consola de Nintendo, ya la han destripado. El hackeo de SNES Mini es una realidad.
Hay cosas en esta vida que un servidor no entiende. La tortilla de patatas sin cebolla, los amantes del Cola Cao o la pizza con piña. Y ahora, hay que añadir una más. El hackeo de SNES Mini.
Sinceramente, culpables, no entiendo esa manía de hacer que los juegos funcionen hasta en un cigarrillo electrónico. Sobre todo cuando hay opciones mucho más viables, baratas y/o sencillas para disfrutar de tus juegos.
La cosa es que, a apenas diez días del lanzamiento de la consola retro de Nintendo, los hackers ya la han destripado a base de bien. Y, la verdad, era algo que se veía venir. Más que nada porque la consola en sí tiene el mismo hardware que la NES Mini. Y esta ya estaba hackeada. Así que, blanco y en botella.
Pues bien. Si estáis interesados en tener una consola oficial de Nintendo, abierta, destripada, modificada (y por lo tanto sin garantía) por los 80 euros que cuesta… adelante. Sois libres de hacerlo. Tenéis el cómo en diversos hilos de NeoGaf, por ejemplo. Y también se puede ver en vídeo.
Si no, siempre podéis acudir a las opciones alternativas y perfectamente legales para jugar a todos tus juegos de Super Nintendo. O por supuesto, poneros a jugar a la consola tal y como viene, sin abrirla ni nada de eso. Que, después de todo, tiene sus 21 juegos enteritos y bien emulados en su interior. Aunque le falte alguno que otro, como Chrono Trigger.
Así pues, nosotros os dejamos aquí las posibilidades. Pero si sois de los que queréis hackearla… ¿al menos podéis explicarnos qué es lo que os motiva a hacerlo? En serio. Necesitamos saberlo.