Análisis de Borderlands 3: Armas, amor y tentáculos. Love is in the air

Una invitación de boda nos hace volver a la acción. Armas, amor y tentáculos es el segundo y gran DLC de Borderlands 3. Desenfunda tu arma Jakobs.

Ya es algo habitual en la saga Borderlands, y su tercera parte no iba a ser diferente. Y es que, los DLC de esta saga son muy bien recibidos entre los fans debido a su gran contenido, diversión y locura. Tras un más que decente primer DLC, nos llega Armas, amor y tentáculos, el segundo y romántico DLC de nuestro shooter favorito.

Este Borderlands 3 está contando con un apoyo superlativo por parte de Gearbox. Junto con este DLC, han llegado un sinfín de pequeños ajustes, y los que están por venir, ya que en abril recibiremos el Modo Caos 2.0 entre otras muchas novedades.

Te invitamos a nuestra boda

El evento que tuvimos por San Valentín ya dejaba caer de qué iba a ir este nuevo DLC. Allí, al finalizar todos los objetivos, recibíamos un fusil francotirador Jakobs llamado Wedding Invitation, ¿y qué personaje de la familia Jakobs sale en este juego? Efectivamente: Wainwright.

Así pues, a nada que hayáis estado un poco atentos a la trama de Borderlands 3, sabréis que había cierto romance entre Wainwright y nuestro querido Hammerlock. Romance que culminará en esta expansión con su boda. Pero culpables, esto es Borderlands, y no iba a ser una boda normal.

Para ello, viajaremos al lejano y helado planeta Xylourgos, que ya solo pronunciarlo nos produce varios tipos de problemas bucales. Una vez allí, encontraremos un planeta nada amigable, bastante inhóspito… y raro. No tardaremos en dar con la wedding planner que ha tenido la maravillosa idea de celebrar en este planeta una boda: Gaige, uno de los personajes de Borderlands 2 añadida DLC mediante.

Pero por supuesto, esto es Borderlands amigos, y nada podría ir bien. Si celebrar una boda en un planeta inhóspito no era suficiente, veremos que hay cierto culto extraño hacia una bestia enorme (ENORME, DE FLIPAR) de la que sólo vemos los tentáculos.

Esa es la premisa de una historia mucho mejor elaborada que la del primer DLC. Veremos como se entremezcla la narrativa lovecraftiana con el universo Borderlands, en una danza de absurdez y misterio con bichos raros que, la verdad, le ha sentado de lujo, y sin escatimar en sorpresas ni en momentos tronchantes. ¡Ah, se me olvidaba! Vuelve Claptrap… lo sentimos.

Lovecraft y su mitología

Como ya he señalado, este DLC bebe mucho de la mitología lovecraftiana. No estamos ante un caso como el de Bloodborne, por supuesto, pero Borderlands sabe darle su toque. Y esto lo vemos tanto en las localizaciones como en los enemigos.

Esta vez nos enfrentaremos a una secta de amantes del bicho gigantesco del planeta. Dicha secta está liderada por Eleanor, la cual controla todo el pueblo y alrededores con su poder. Así pues, será ella la de enviarnos al primer tipo de enemigos, de carácter humanoide, los cuales van ataviados de ropajes extraños e incluso, alguno, posee tentáculos. Sí, ya que referencian a Lovecraft, lo hacen a lo bestia. Y oye, bien por ellos. En el segundo grupo de enemigos encontraremos a las bestias. Hay de varios tipos y todos tienen diseños en los que priman los tentáculos y varios ojos. Mención especial a los voladores, que nos pondrán las cosas bastante difíciles.

Por otro lado, encontramos una gran variedad de escenarios en este segundo DLC. Tendremos un pueblo pequeño por el que movernos y que, al principio, nos brindará una gran cantidad de conversaciones realmente graciosas. Probad a hablar con ellos en cuanto el juego os lo permita, os prometo que no merece la pena.

Al pueblo ya mentado, le acompañan parajes naturales, como una montaña inmensa y helada o una zona, helada también, bastante amplia por la que movernos. Y por supuesto, construcciones hechas por DAHL, porque ya sabéis, estos tipos están en todos los lados. Y alguna sorpresilla más que mejor no mencionaré, para que la disfrutéis.

Dame más armas

Lo que es realmente reseñable de este segundo DLC es lo vasto de su contenido. Tendremos un buen numero de misiones secundarias que acompañan a una historia principal de unas cinco horas. Tendremos, también, más bosses que en el primer DLC, cuyo combate resulta algo más entretenido y desafiante en los niveles más altos, aunque si jugáis en el nivel más elevado es porque estáis preparados de sobra.

También se han añadido tres tipos de coleccionables en este DLC. Vuelven las cazas de Hammerlock, algo esperado dado lo a huevo que se ponía. Por otro lado, otro de estos coleccionables consiste en encontrar regalos de bodas que han dejado los otros personajes del universo Borderlands. El ultimo tipo de coleccionable consistirá en destrozar unas estatuas demoníacas.

En cuanto a gráficos nada más que añadir, salvo lo bonito del nuevo arte. Referente al sonido, es imposible pasar por alto el excelente trabajo de doblaje y adaptación de este DLC, muy en la línea de la saga. Y el tema del boss final, también muy bueno.