Arrow 5×04 – Crítica

Arrow sigue intentando meternos con calzador a los nuevos reclutas, pero sus intentos por darles carisma y acercarlos al público no están funcionando.

Parece que en Arrow los guionistas quieren contar muchas cosas en muy poco tiempo. O eso, o no me explico este capítulo lleno de atropellos y momentos, cuanto menos algo forzados.

Dos tramas se cruzan en este episodio 5×04. Por un lado tenemos la del nuevo equipo Arrow, al que le falta más de una y más de dos sesiones de entrenamiento, y por otro lado la de nuestro querido amigo John, al que, personalmente, tenía ganas de quitar de en medio. Pero parece que eso no va a ser así.

La trama, pese a que es algo más interesante que lo que vimos en la pasada temporada, empieza a flojear un poco y a tener momentos muy forzados. Church sigue siendo un enemigo imbatible para Arrow, lo cual lo coloca a la altura de Ra’s Al Ghul (por lo menos). Y sigo sin explicarme el por qué. Además, la facilidad para hacer las cosas «malas» en esta ciudad es muy asombrosa.

Pero vamos a los puntos forzados. ¿De verdad me estáis diciendo que Felicity, que se anticipa a todo, no tenía ni idea de los planes de CHurch cuando atacó la zona de pruebas de comisaría? Felicity ha destacado por tenerlo todo en su cabeza bien amueblada, y sin embargo, en este capítulo vemos a una chica muy perdida y lejos de lo que solía ser. Además, hace tiempo que echo de menos sus gracias.

Punto forzado número dos. Entiendo que tenemos a personajes protagonistas que no deberían de morir, pero si los guionistas no quieren que esto suceda, simplemente que no los pongan en aquellas escenas en las que, por lógica pura, deberían morir. Hablo, cómo no, del ataque a la comisaría donde el Fiscal y el nuevo Teniente de Alcalde se encuentran cara a cara con Church… ¿y no les mata? Si le ha pegado tiros a cualquiera que le tose. No digo que quiera que mueran estos personajes (aunque sus dramas ya cansan), pero me repito: no los pongáis en escenas donde deberían morir.

Sigamos con los puntos forzados, y esta vez vamos con Felicity y Rory. En u sólo capítulo vemos cómo el muchacho pasa de estar fuera a estar dentro. Una chara y se acabó. Ahora estoy dentro y todos me quieren, sobre todo Felicity. Podrían haberle dado un poco más de tiempo al chaval del que, por cierto, seguimos sin saber nada de sus poderes. ¿Qué hace exactamente? ¿Qué habilidades tiene ese traje? Además de antibalas y antiexplosiones ¿qué más hace? Y sobre todo, si su padre ya lo usaba ¿de dónde lo sacó él antes? ¿Arrow no pregunta esto? Muy extraño, teniendo en cuenta que este hombre no se fía ni de las moscas de la basura.

Pese a todo ello, el capitulo consigue mantener una mínima cordura dentro de todo este estropicio de trama aunque todo aquello que había mejorado en cuando al tema de escenas de acción ha desaparecido. Y pobres militares, quedan como tontos absolutos.

Por cierto, ¿alguien va a cerrar alguna vez la puerta de esa base secreta? Porque ahí entra quien quiere y como quiere. ¡Ah! Y siempre con una frase en el momento justo. Menos mal que al final al menos ellos mismos se ríen de este abusivo uso de entradas triunfales, o cools.

En definitva, un capítulo que no me ha gustado nada, que no tiene trama interesante y que no es capaz de darle más profundidad, por mucho que lo intenta, a unos personajes metidos con calzador en la serie. Quizás la forma de reunir al equipo no haya sido la más acertada. Quizás deberían de haber ido llegando uno a uno y darnos tiempo a conocernos. Incluso debería de haber habido algún fallo o alguna renuncia «seria».

Pero esto está haciendo que los personajes reclutados, pese a tener nombres como Overwatch, tengan muy poco carisma, y apenas pinten nada en la serie. Solo Rene se salva. Y aún así es un personaje muy forzado.

Veremos a ver por dónde lo llevan, pero intentan meternos a tres personajes a la fuerza. Y no está cuajando.

Un último apunte: ¿soy el único que no se fía de este fiscal?