Crítica de Boruto: Naruto Next Generation 55

La previa a la tormenta llega con Boruto: Naruto Next Generation 55. Tras la derrota del Hachibi las miradas se centran en el jinchuuriki del Kyubi. Justo a tiempo para el examen de Chuunin.

Al contrario de lo que pensaba que iba a ocurrir, Boruto: Naruto Next Generation 55 continua el anime a buen ritmo. No está siendo ni excesivamente rápido ni muy lento. Y esto, viniendo de donde venimos, es toda una sorpresa.

Así que, tras pocos capítulos del inicio de la saga, ya tenemos la acción a punto de caramelo, aunque me da en la nariz que no veremos algo «chulo» hasta dentro de un par de semanas.

La historia de Kaguya

Poco a poco vamos descubriendo (si no hemos visto la película, claro) qué buscan los enemigos de turno. El clan de Kaguya (los Kaguyos para un servidor) parece que son la amenaza de la que la muchacha se estaba intentando proteger.

Ya lo comentó Sasuke en algún momento del anime: que había algo más poderoso que ella y a lo que le tenía miedo. Por eso creó los Zetsus Blancos. Y ahora se están activando.

 

Con toda esta situación, al menos ya nos hacemos a la idea de lo que pasó en su momento y de dónde ha salido esta mujer. Ha sido como el paso de Dragon Ball a Dragon Ball Z. De ser una especie de diosa a ser parte de un clan de ¿alienígenas? que drenan la vida del planeta. Menudo cambio.

Sin embargo, y para seguir con el símil de la historia de Goku, la que iba a ser la sentencia de muerte del planeta acabó aliándose con ellos y creando el ninjutsu. Lástima que al final se le fuese tanto la oya, porque esto prometía más que el culebrón del medio día.

No es que hayan sido muy extensos en cuanto a explicaciones. Pero sinceramente, después de todos los flashback que hemos tenido en Shippuden, de todas las historias que nos han contado y de lo lento que ha ido el anime, lo último que queríamos era otra mirada al pasado para que nos contasen con pelos y señales la vida y amores de Kaguya.

Aunque, por desgracia, aún se lo pueden sacar de la manga…

Los nuevos rivales

Hasta el momento, el anime nos ha traído a los ninjas de nuestra aldea de Konoha, pero al igual que lo hizo Naruto, poco a poco se van abriendo las fronteras.

Ya hemos visto a algunos ninjas de la aldea de la niebla pero hoy hemos conocido por fin al hijo de Gaara y a su equipo. Tan simático como su padre, desde luego. Y tan expresivo. Habrá que ver cómo le va en el terreno del examen.

 

El resto de ninjas que veremos durante la prueba parece que aparecerán la semana que viene. Se hará una pequeña presentación de ellos (supongo) y nos mostrarán lo malos que pueden llegar a ser. Esperemos, eso sí, que sean bastante más originales que los de Konoha, que siguen siendo clones de sus padres.

Las dudas de Boruto

Si hay algo que me fastidia, y mucho, de las series/películas de este estilo es cuando ves que la están liando a pesar de que saben que la están liando. Ese momento en el que el tío hace una estupidez y rompe con la chica en las películas romáticas o cuando todo va bien, de pronto alguien dice una frase fuera de contexto y lo jode.

En este caso vemos que el principal fallo de Boruto es la maldita herramienta ninja que, a todas vistas, es un dopaje. Y no está permitido por el Hokage. Él mismo se ha dado cuenta de que no es muy lícito usarlo y lo guarda. Pero al final sucumbe a la presión y parece que lo va a usar en el examen de Chuunin.

Esto se une más a la tirria que le tengo al muchacho. Un cerebrito que, a diferencia de su padre o de Sasuke, no tiene ganas de esforzarse nada.

En fin, a ver cuándo le pillan y cómo soluciona el entuerto en el que se va a meter… Porque la va a liar seguro.