Team Ninja ha anunciado la fecha del segundo DLC de Nioh y está más cerca de lo que creíamos: sale el 25 de julio. Llega el invierno y tenemos que desenvainar la katana de nuevo.
Team Ninja ha anunciado la fecha del segundo DLC de Nioh además del contenido que incluirá. Su nombre es Honor Sublevado, muy rimbombante y dramático, acorde a la situación, y saldrá el 25 de julio. Estará disponible a través de la Playstation Store por un precio de 10 euros o a través del pase de temporada.
Según revela el blog de Playstation, la nueva zona que estará disponible es el Castillo Osaka, el mayor castillo de la era Sengoku. También incluye al guerrero Sanada Yukimura, samurái de Tokugawa Ieyasu y protagonista de varias leyendas populares japonesas. Líder del Asedio Ninja de Osaka, Demonio carmesí o el mayor guerrero de Japón son algunos de sus nombres. Era el más chulo del barrio. La batalla entre el ejército de este y William, el protagonista, es el eje central del DLC.
Buscando a María, William acaba en el castillo Sanada Maru, construido por Yukimura como medida de defensa. En medio del invierno gélido de Osaka, por lo que los paisajes helados serán protagonistas. Y algún que otro enemigo puñetero que se aproveche del hielo también, seguro.
Nuevo contenido
Además de todo el contexto histórico y de nuevos paisajes, el DLC incluirá armas, armaduras, objetos y espíritus guardianes nuevos. También, cómo no, enemigos y jefes finales a los que destrozar a «katanazos». Por si fuera poco, se añadirán nuevos niveles de dificultad (lo que faltaba…) y Trofeos. Un buen repaso y una pasada a todas las misiones y submisiones del DLC se antoja necesaria si queremos conservar el Platino y el 100 %.
Este es el segundo pack de contenido adicional que recibe Nioh, ya que hace unos meses llegó El Dragón del Norte, el primer DLC. Es gratificante ver que se sigue hablando de samuráis 5 meses después de su lanzamiento. Más aún cuando ha resultado ser uno de los juegos del año, pero tapado por otros excelentes lanzamientos. Pero para dar «katanazos» un rato siempre hay hueco.