Crítica de One Piece 813

Pese a no haber demasiada acción en One Piece 813, la cosa se pone muy interesante. Segundo capítulo de «trama» y el climax comienza a crecer de nuevo gracias a Brook y Pedro.

Las cosas en Whole Cake Island están muy lejos de terminar. One Piece 813 sigue demostrando que Oda tiene una capacidad de planificación y de imaginación que no es normal en los shonen de hoy día. Luffy y Nami por un lado, Brook y Pedro por otro. Y por último, aunque un poco olvidados, Chopper y Carrot.

Todo se va entrelazando poco a poco y vamos conociendo los intríngulis de palacio. Y de paso, Big Mom empieza a perder la paciencia y a dar, de nuevo, mucho miedo.

Luffy vs Big Mom

No sé cuándo llegaremos a ver este enfrentamiento directo entre los dos piratas. Pero desde luego no ha sido hoy. Y según creo, no será ni si quiera en esta saga. Aún Luffy tiene que aprender muchas cosas para poder llegar al nivel de un Yonkou.

Pero desde luego el capitán le echa agallas y reta a todo lo que se le presenta por delante. Por suerte para él, está dando con enemigos a los que o bien puede derrotar, o bien que están dispuestos a ayudarle.

Big Mom no ha aceptado el reto de Luffy, pero si lo hubiese hecho, habría acabado destrozado. Ya le pasó con Aokiji, con Kizaru y hasta con Kuma. Pero por suerte, el primero le debía un favor a su familia y el segundo se topó con la intromisión del Kuma, que salvó a toda la tripulación antes de que el Almirante los matase.

Pero en esta situación no hay nadie que pueda hacerle frente a Big Mom para ayudar a Luffy en una más que posible derrota. Están rodeados de enemigos. De grandes enemigos, además. Y encima no sabemos bien cuál es el alcance del poder de Big Mom. Ya sabemos que controla el clima y que, además, puede robar la esperanza de vida de la gente. Pero en batalla no tenemos mucha idea. Solo cuando tuvo ese arrebato de locura al principio de la saga.

Lo que pasa es que, tenga el poder que tenga en batalla, es una Yonkou. Y a 800 capítulos del inicio del anime, es un personaje que sigue imponiendo. Un enemigo al que Luffy, hoy por hoy, no puede derrotar. Al menos solo. Y, vamos, pongo la mano en el fuego porque no será esta la saga en la que Big Mom salga derrotada. Ni si quiera, enfrentada al capitán de los Mugiwara. Es muy pronto todavía. Que ni si quiera tiene el despertar de su fruta.

Recuperando recuerdos

Hoy ha sido un capítulo en el que se ha hecho mención a varios momentos del anime. Y, una vez más, no me cansaré de repetir que aquí se demuestra que Oda no se inventa las cosas sobre la marcha. Que tiene un plan muy bien estructurado para que todo encaje en la historia. Y si no, mirad.

Big Mom habla del Tamatebako, una caja que se supone que tiene un tesoro en su interior. Y hace referencia también a la isla Gyojin. Pues bien. Vamos a rescatar un poco la historia de esos momentos, porque es muy importante.

Esa caja lo que contenía era los esteoroides que usaron los piratas de Hody Jones para coger más fuerza. Como recordaréis, el efecto secundario era el de hacerlos envejecer prematuramente cuando el efecto se pasaba. Pues bien, con motivo de esto, y para evitar que nadie más los usase de nuevo, los Gyojin metieron una bomba dentro del Tamatebako para que explotase si alguien lo abría.

Sí. Una bomba, culpables. Y Big Mom pretende abrirla durante su ceremonia. Curiosa forma de aguarle la fiesta a la emperatriz pirata, sin si quiera haberlo planificado, ¿no? Habrá que ver si esta fiesta tiene o no lugar al final, pero desde luego, ya tenemos algo de lo que preocuparnos. Linlin está deseando que todo salga bien, y es solo por eso por lo que está aguantando mucho su ira. Si algo sale mal… madre mía la que se podría liar.

Esto lo vemos en entorno al capítulo 570 de One Piece. Estamos en el 813. Oda ya tiene muy claro qué quiere hacer con el tamatebako. Por ahora parece que va a ser el cebo para que los poneglyph  se queden desprotegidos… más o menos. Pero seguro que no será lo último que veamos de él.

Lola

El segundo punto importante que vemos en el episodio de hoy es la historia de Lola. Ahora, después de muchas sagas de por medio (creo que salió entorno al capítulo 370 del anime), por fin hemos podido saber la historia completa de la hija de Big Mom y el porqué de su fanatismo por casarse con alguien a quien ella quisiese.

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¿No os parece increíble que 450 capítulos después, un personaje que aparentemente no iba a tener mucho más impacto en el anime de pronto haya sido tan importante para la historia? No es algo que simplemente se haya rescatado como un recuerdo y punto. Es que, en su momento, Lola ya dijo que su madre era una gran pirata. Encima le dio la vivre card a Nami (o por aquel entonces Namizo) con toda la intención del mundo. Y por supuesto, está la locura de querer casarse con «to quisqui».

Después de muchos años esperando, ahora ya sabemos que es hija de Big Mom y que quiere casarse por su propio pie. Y gracias a la vivre card que le dio a Nami, Luffy y ella han podido derrotar a Cracker y llegar tan lejos. Solo nos falta saber qué matrimonio fastidió…

No me cansaré de repetirlo. Oda tiene todo One Piece planeado. Se inventa poco sobre la marcha. Detalles o, supongo, algún que otro enemigo. Pero lo que es la trama principal, la historia en general y el curso de los acontecimientos, están más escrito que la tablilla de los diez mandamientos.

Esto hace que la serie tenga una profundidad increíble. Y si a eso le sumamos que, si tienen que pasar 100, 200 o 300 capítulos hasta que algo tenga sentido, él no tiene prisa ninguna en decirlo. Por esto (entre otras cosas) sigo pensando que One Piece es el mejor manga que hay del estilo. Y el anime, también. Sobre todo cuando las mismas melodías del capitulo 1 te siguen poniendo la piel de gallina en el 813.

Go! Go! Brook

Para terminar, no podemos olvidarnos de Brook. Hace mucho tiempo que no vemos al bardo de la tripulación hacer de las suyas en condiciones. Prácticamente desde la isla Gyojin y, si me apuráis, en la la saga de Caesar Clown.

Ya va siendo hora de que nos demuestre sus habilidades y que entre los Mugiwara no solamente hay bestias pardas. También hay personajes con cabeza y que saben urdir planes.

Ahora a ver cómo lo llevan a cabo y cómo nos sorprende. Tiene una oportunidad de oro para hacerse con los poneglyph. Big Mom piensa que van tras el tamatebako, así que igual que se quedan un poco desprotegidos y le dejan acceder. Pero… aún así ¿cómo los va a sacar? Que no son piedras que quepan en los bolsillos.

La cosa se pone chunga e interesante. Tenemos a Big Mom cabreada tras su musical y a Brook a punto de entrar en acción contra otra general dulce. El capítulo que viene promete, culpables. Y mucho.

Por cierto, ¿qué va a hacer Pudding?