Stardew Valley se está convirtiendo (si no lo es ya) en una de las sorpresas del año en Steam con 500 000 copias vendidas. Se trata de un farming simulator y RPG que recoge varias cosas de obras como Harvest Moon, Terraria o el propio Minecraft.
He aquí el tráiler del juego, subido por el creador a su canal, Concerned Ape.
Con coger varias cosas no nos referimos a la composición o los gráficos, sino el estilo. La búsqueda de recursos, por ejemplo, es un factor clave. Tienes una granja que produce dinero, y tienes que empezar con una inversión hasta que eso dé bastante pasta, pero claro, eso no se hace solo.
Además de esto, que constituye el punto principal, hay zonas de combate con monstruos o animales salvajes, misiones aleatorias, un componente social con los ciudadanos del pueblo donde vives… Y todo conforma una crítica hacia la sociedad. Casi nada.
Con estos datos quizá sea más fácil entender el gran éxito que está teniendo. Un éxito que ni el autor, Eric Barone, se esperaba. El juego vio la luz en 2012, y desde entonces Eric lleva trabajando en él como cuenta a Polygon. El apoyo de la gente de los foros en esos 4 años y ahora mismo también son un factor clave a la hora de entender este fenómeno.
Y no se queda en las ventas. Unas ventas que por cierto rozan del supuesto top 20 de Steam del año pasado. Es que es un vicio insano, según las cifras de la plataforma de Valve. Las críticas y los comentarios de Steam son, en su absoluta mayoría, positivos.
El juego no es para todo el mundo, eso desde luego. Pero para los que le gusta, se ve que ha sido una revelación. ¿Estamos ante un juego capaz de plantar cara a la hegemonía de Minecraft? ¿O es el juego del momento? Sea como fuere, es un indie, hecho por una persona solo, ha pasado por el acceso anticipado, está currado, es un todo en uno lleno de secretos… el éxito es merecido.