Llega el verano y es el momento de decidir. O salimos y nos ponemos morenos o nos encerramos en casa hasta que llegue el frío de nuevo. Sea cual sea tu decisión, siempre puedes tener un poco de tiempo para hacer otras cosas. Así que, de cara a ello, aquí os dejamos un listado de los mejores Life Simulator que hay en el mercado ahora mismo.
Vamos a hablaremos de varios de ellos, os contaremos los pros, los contras, lo que nos ha gustado y lo que no. Y por supuesto, dónde se juega mejor que en ningún otro sitio.
Así que atentos, que vamos a tocar todos los palos. Os diremos qué predomina en cada juego, dónde podréis jugarlo y qué ventajas tienen con otros.
Empezamos por uno de los más famosos que hay ahora mismo en el mercado. El maravilloso mundo pixelado de Stardew Valley que, para el que no lo sepa, se sigue actualizando.
En este juego nos vamos a encontrar con una granja como herencia. Y como estamos tan hartos de la vida en la ciudad, decidimos aceptarla y cambiarlo absolutamente todo por ella.
Nuestra vida
En este juego lo que prima es la granja, básicamente. Conforma pasen las estaciones podremos tener diferentes cultivos que tendremos que cuidar. Es decir, regar cada día, abonar, mantener lejos de las malas hierbas y los cuervos, etc.
También podremos tener nuestros animales en diferentes establos o corrales. Esto nos permitirá tener más material para hacer nuestros productos y venderlos para sacar una buena pasta.
Hay otros elementos que también son importantes, como el acceso a un par de minas, que son el elemento de combate y exploració básico del juego. La pesca o la recolección también son importantes para poder desarrollar nuestra granja.
Social
El juego introduce un elemento social que ha enamorado a muchos. Tendremos que ir relacionándonos con todo el pueblo en el que nos mudamos para poder acceder a misiones especiales o eventos individuales. Podremos tener amigos, casarnos (con quien sea, chico o chica), y formar una familia.
El sistema es bastante simple, pero efectivo. Hablar con la gente nos da puntos. Regalarle cosas igualmente (depende de cuál, cada uno tiene sus favoritos). Acordarnos de sus cumpleaños o interactuar en las fiestas del pueblo también nos hará ganar enteros. Y sobre todo, no olvidarlos, porque si no charlamos con ellos cada día, perderemos puntos.
Cuando lleguemos a determinado nivel de amistad se desbloquearán escenas especiales y misiones. Podremos acceder a nuevas zonas y misterios. Por eso, es importante no olvidar las relaciones.
Personalización
El juego tiene un aspecto pixelado que le da un verdadero ambiente retro-adorable. Sin embargo, esto impide que podamos personalizar en profundidad nuestra granja.
Sí, podremos hacer muebles para el interior de las casas, colocar los edificios en donde queramos de nuestro terreno e incluso colorear las paredes o algunos muebles. Pero no dejan de ser los predefinidos. Y realmente hay pocas opciones.
Eso sí, el personaje es el que es, y aunque podemos elegir algunos caminos conforme avancemos en nuestras habilidades (recolección, combate, pesca, etc…) no soy tampoco muy variadas.
No es el punto más fuerte del juego, pero en las actualizaciones que van llegando le han dado muchos retoques y mejoras.
Dónde jugarlo
Podríamos decir que lo puedes jugar en casi cualquier plataforma, sin embargo, ojo a lo que os contamos. En consolas actualmente no está disponible el multijugador, pero en PC sí.
Allí se están haciendo las pruebas para pdermitir las partidas con amigos en el juego, así que si queréis probarlo con más colegas, tendréis que elegir el PC.
Si no, posiblemente Nintendo Switch sea la opción más ideal ya que no consume en exceso la batería y en modo portátil es una delicia.
[column size=one_half position=first ]Pros
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[column size=one_half position=last ]Contras
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Otro juego que lo está petando bastante fuerte en estos momentos, y eso que es un early access. Tiene muchos de los elementos que veremos en los otros juegos de los que hablamos. Pero en esta ocasión nos vamos a centrar en la construcción. Hablamos de My Time at Portia.
Somos el hijo de un constructor de una isla muy cuca. Y volvemos para coger su taller y llevarlo de nuevo a lo más alto. Bueno, para eso y para explorar la isla, que tiene muchos misterios.
Nuestra vida
A diferencia de muchos otros, aquí seremos constructores. Hay cultivos, pero son una parte algo más secundaria.
Desde el principio tendremos que ir construyendo maquinarias para poder elaborar elementos más complejos. Por ello, en esta ocasión la recolección es más importante que la granja en sí. La minería y la exploración de las ruinas será algo que tendremos que hacer con mucha frecuencia si queremos mejorar nuestro taller.
Como constructores, se nos irán asignando tareas. Bien por parte de los habitantes de la isla, o bien por parte del gobierno. Esto nos irá dando más pasta, más prestigio y más recursos. Además irá cambiando el aspecto de la isla conforme avancemos en la historia.
También hay pesca, ganadería, y un sistema de combate más elaborado que en otros, pero igualmente simple. Eso sí, es lo suficiente como para darle ventaja sobre casi todos los demás.
Habrá que tener cuidado con las estaciones, el clima y demás elementos que tienen todos estos juegos.
Social
El elemento social en Portia es también muy importante. Podríamos decir que va a un nivel más que Stardew Valley, por ponerlo como referencia. Hay una cincuentena de habitantes en la isla repartidos por todos los rincones. Y todos tienen algo que decirnos y hacernos.
El sistema de amistad está mucho más elaborado ya que no solamente podremos hablar y regalar. También podremos interactuar con ellos para practicar, por ejemplo, sus hobbies favoritos. El 5 en raya, una pelea, dibujo, pesca, combates… hay varias opciones. Y cuando lleguemos a determinados niveles, hasta podremos tener citas con ellos.
También hay matrimonio con casi cualquiera de la isla. Y hay para elegir un montón de ellos. Tanto chicos como chicas. Y, por supuesto, formar familia.
Personalización
Al igual que Stardew Valley, My Time at Portia es un juego que permite personalizar hasta determinado punto nuestro taller.
Hay muchos más objetos para decorar la casa. Muchísimos más, desde luego. Esto nos dará mucho juego a la hora de usarlos y colocarlos en casa. Pero además de esto, servirán también para atraer nuestras citas o para obtener ventajas en nuestro día a día, como más HP o más energía.
El personaje también es muy personalizable. Hay una serie de ramas de habilidades que podremos mejorar conforme subamos de nivel (sí, hay niveles), y nunca se pueden completar todas. Hay que saber por dónde queremos ir para mejorar lo que más nos interese.
Dónde jugarlo
My Time at Portia se ha anunciado para todas las consolas pero por el momento no tiene fecha definida. Ahora mismo solo se puede jugar en Steam bajo un early access, pero tiene actualizaciones cada dos por tres.
No tiene excesivos fallos y el juego va muy fluído, así que si queréis darle un tiento, tendréis que hacerlo en el compatible.
Una vez salga en consolas, si tenéis Nintendo Switch posiblemente tenga las mismas ventajas que Stardew Valley. Pero ya es decision vuestra.
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[column size=one_half position=last ]Contras
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Otro de los títulos que están ahora mismo con un pie en casa es Staxel. Se trata de un juego que apunta mucho al tema personalización y gestión de granjas pero que, por contra, descuida bastante el tema social.
La característica principal de este juego es su aspecto estilo Minecraft. No se puede negar que tiene algo de personalidad, pero desde luego nos recordará al de Mojang en más de una ocasión.
Nuestra vida
Pues bien. No es que sea el más original del mundo en este sentido. Al igual que todos los demás, llegaremos a un pueblo donde tendremos que empezar casi de cero. Lo bueno es que nos dan la casa por lo que la hipoteca ya la tenemos pagada.
A partir de aquí tendremos que conseguir nuestra licencia de granjero y empezar a cultivar como locos y descosidos.
El sistema de cultivos en Staxel es complejo y cuesta manejarlo al cien por cien. Es su punto más fuerte y donde vamos a encontrar la parte más interesante del título. Hay un porrón de cultivos y de formas de hacerlos crecer.
También tendremos animales, incluso mascotas, a las que tendremos que cuidar y mimar. Y desde luego no son tampoco simples de contentar.
La recolección por el mundo también es algo importante, aunque no tanto como en otros títulos. Pasaremos la mayor parte del tiempo en el pueblo o en nuestra granja poniéndolo todo súper cuco.
Social
La parte social es importante en el juego, pero queda muy de lado. Casi al igual que en Animal Crossing (que veremos más adelante) en Staxel caemos bien a casi todo el mundo sin hacer nada. Tendremos que ganarnos su confianza, desde luego, pero poco más podremos hacer.
Hablar con ellos, cumplir misiones o darles regalos. Aquí acaba la interacción. Además, no hay posibilidad (por el momento) de bodas ni familias. Con ningún personaje. De acuerdo que es un early access todavía, pero no es que tengan planes de meterlo de primeras en el juego.
Es quizás su mayor «pero» por el momento. Un título de estas características con un sistema social tan pobre acaba cansando un poco rápido. Y eso que los personajes están bien definidos y acaban por tener su protagonismo durante la «historia».
¡Ah! Y lo mejor del juego es que está pensado para jugar con amigos. Es decir, es multiplayer de inicio. No necesitas a gente para jugar… pero siempre es más divertido.
Personalización
Otro de los puntos fuertes de Staxel. Como su propia estética anuncia, la personalización tanto interior como exterior de nuestra granja es lo más divertido y lo que más horas nos quitará.
Al tener este estilo Minecraft nos permite decorar muy libremente. Además, hay un montón de elementos que podremos crear, no solo muebles. Esto hace que ponernos a decorar la casa es muy pero que muy divertido.
Además, el estilo que tiene es bastante pintoresco. Si estás acostumbrado a jugar a Minecraft te resultará cómodo decorar tu entorno. Pero no te creas que será tan sencillo. Dale tiempo, porque esto puede llevarte horas y horas.
Dónde jugarlo
Staxel es un early access que está ahora mismo solo disponible para Steam en PC. Por el momento poco hay de su salida en consolas ya que están centrados en llevar la versión defitiva a PC.
Puedes conseguirlo desde su página oficial donde dan muchos más detalles del juego. Además, van actualizando con los parches que van saliendo. Así que, échale un tiento.
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[column size=one_half position=last ]Contras
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Animal Crossing es uno de los más veteranos de la lista, si no el que mas. El primer título de esta colorida saga de Nintendo se lanzó en 2001, solo en Japón y para Nintendo 64. Pero en Europa no tuvimos que esperar mucho, ya que en 2004 pudimos disfrutar de su primer título para Nintendo GameCube.
Animal Crossing ha sido uno de los más grandes éxitos de venta para Nintendo en todas sus versiones, así que requiere poca presentación. Y es que su genialidad se basa en su simpleza: llegamos a un pueblo, nos regalan una casa y simplemente tendremos que ir mejorando tanto nuestra casa como nuestro pueblo para que cada vez sea todo más bonito y feliz.
Nuestra vida
En este caso no tendremos que hacernos cargo de una granja. La trama es distinta según el título, pero en general el principio siempre es igual: llegas a un pueblo con los bolsillos vacíos y una pequeña casa con tan solo un par de muebles y una habitación.
Nada más llegar conocemos a Tom Nook, un personaje que se ha ganado el odio de muchos jugadores gracias a su pesadez con las hipotecas (nunca se cansa de pedir dinero, el tío). Él será el que nos vaya mejorando nuestra casa a cambio de una cantidad de bayas (el dinero del juego) que irá aumentando en cada renovación. Pagar la última hipoteca es como un sueño hecho realidad.
Pero, ¿qué se hace en Animal Crossing? Pues las actividades que más tiempo nos robarán serán cazar insectos, pescar y desenterrar fósiles. Parece algo muy simple, pero el catálogo de especies es enorme y es complicado capturarlo entero. Hay animales que solo aparecen en determinada estación, o solo un par de horas al día.
Todo lo que encuentres o captures podrás donarlo al museo o venderlo, siendo la principal fuente de bayas para pagarle al amigo Nook las hipotecas. También puedes hacer recados a tus vecinos, plantar árboles y flores, personalizar totalmente tu casa… A pesar de parecer rutinario, está lleno de sorpresas y es muy difícil aburrirse.
Social
Una parte muy importante de Animal Crossing son los vecinos. Puedes interactuar con ellos cuando te los encuentres por el pueblo, o directamente ir a visitarles a casa. Las conversaciones son muy variadas, y cada personaje tiene su propia personalidad.
No se puede mantener una relación romántica con ningún personaje (además son animales, sería un poco raro). Tampoco hay indicador de amistad, ya que Animal Crossing es un juego tan feliz que directamente le caes bien a todo el mundo.
Desde el día 1 te regalarán cosas, te pedirán favores, te enviarán cartas… Si un vecino pasa mucho tiempo en tu pueblo le coges hasta cariño, hasta que te parten el alma diciendo que se mudan a otro pueblo. Pero bueno, siempre llegará un nuevo animalito para reemplazarle.
Personalización
La personalización es otra de las claves de esta saga. Nada más empezar tendremos un personaje aleatorio, pero desde el principio tendremos una tienda de ropa y accesorios para vestirnos como queramos.
Más adelante también se puede crear una peluquería, donde podremos cambiarnos el tipo y tono del pelo y hasta el color de nuestros ojos.
Pero la diversión de Animal Crossing radica sobre todo en la decoración de nuestra casa. Hay una infinidad de muebles de un montón de estilos, paredes, suelos, alfombras… Creo que he perdido la cuenta de las veces que he redecorado mi casa. Y de las bayas invertidas en muebles y adornos nuevos cada vez que me cansaba de los anteriores.
Según vayamos pagando hipotecas podremos crear más habitaciones para nuestra casa, con mucho más espacio para decorar. Incluso podemos personalizar el aspecto de nuestra fachada, cambiando el tejado, la puerta, las ventanas… Eso sí, con un desembolso previo de bayas, que Tom Nook no hace nada gratis.
Dónde jugarlo
Actualmente el último titulo que se publicó de la saga Animal Crossing fue en Nintendo 3DS, llamado New Leaf. También cuenta con una versión móvil, gratuita y obviamente algo diferente a la de la consola, pero bastante entretenida.
Si buscáis algo más «retro», la saga Animal Crossing también posee títulos en Nintendo GameCube, Nintendo DS y Wii.
Además, Animal Crossing cuenta con varios spin-of centrados en otros aspectos de la saga, como Happy Home Designer para Nintendo 3DS y Amiibo Festival para Wii U.
[column size=one_half position=first ]Pros
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[column size=one_half position=last ]Contras
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Otra de las sagas más veteranas de este mundillo es Harvest Moon. En él se mezclan un poco varios estilos de juego. Pero dependiendo de cuál prefieras, podrás optar por alguno de los spin off que tiene la saga.
Principalmente nos encontraremos con Harvest Moon, centrado en la gestión de la granja. Pero también tenemos Rune Factory, con un elemento más importante de exploración y combate, y Story of Seasons, un spin off raro que simplemente tiene un nombre distinto por problemas de licencias en el extranjero.
Nuestra vida
Más o menos, todos los Harvest Moon empiezan igual. Incluídos los Rune Factory. Tendremos que empezar casi de cero en una granja y hacer todo lo posible por mejorar. Tanto nuestra zona como la ciudad que tengamos al lado.
Como os digo, este juego tiene también algunos elementos de combate y exploración. Sin embargo, son mucho más profundos en Rune Factory.
Harvest Moon de por sí no es que tenga una historia muy profunda, pero algo hay. Rune Factory, por su parte, sí que tiene algo má de trama. Podríamos decir que este spin off es el que mezcla la gestión de granjas con una jugabilidad estilo los Zeldas clásicos.
Básicamente tendremos que recolectar objetos, cuidar la granja, mimar a los animales y todas esas cosas que se suelen hacer en un juego de este estilo. El objetivo es acabar teniendo una granja bastante grande con plantaciones, animales y cosas bonitas de por medio.
El problema es que muchas veces todo es demasiado sencillo en la saga. Y eso hace que perdamos el interés bastante rápido. Por ejemplo, podremos cultivar cosas de otras estaciones en cualquier momento. La penalización es que tardarán más o no nos darán cultivos de alta calidad. Pero ya está.
En Rune Factory también se implementan las batallas. Hay jefes y mazmorras medianamente grandes. Así que nuestra granja nos sirve de soporte para poder ir mejorando y accediendo a sitios cada vez más peligrosos.
Social
Harvest Moon, cómo no, tiene un sistema social. EN él podremos hacernos amigos de los aldeanos e incluso tener relaciones románticas con algunos. Es un juego de corte más clásico, así que no esperéis que tengamos la posibilidad de ser parejas homosexuales o cosas raras. Aquí los chicos con las chicas y al revés. Punto pelota.
El sistema tampoco es que sea una locura. Hablar con ellos o regalarles cosas es lo que más suele funcionar. Incluso a veces, demasiado. De hecho, los últimos Harvest Moon han sido un poco demasiado fáciles en este aspecto. Incluyendo las misiones que nos piden los aldeanos.
También tendremos la posibilidad de crear una familia, cómo no. Para ello necesitaremos encandilar a nuestro prometido o prometida. Normalmente esto ya lo hacemos cuando hemos terminado la historia en sí. Aunque a veces ocurre demasiado pronto. Ya os digo que, quitando Rune Factory, las cosas no son muy profundas en la saga.
Personalización
No es uno de sus puntos fuertes, pero está presente en el juego. Podríamos decir que la personalización de Harvest Moon es similar a la de Stardew Valley. Está, pero no destaca. Vale, es un poco más compleja, pero tampoco os esperéis una locura.
La mayor parte de la personalizción la encontraremos, sobre todo, en la granja. Allí podremos distribuir nuestros cultivos o zonas de animales como nos dé la gana.
Como os digo, la personalización está presente, pero no es que sea el mejor factor del juego. Si queréis eso, posiblemente Animal Crossing sea lo más bestia que os encontréis.
Dónde jugarlo
El juego ha tenido versiones en un montón de consolas. Sobre todo las portátiles. Pero si queréis echaros por los últimos, tenéis varias opciones.
Para empezar, acaba de salir Harvest Moon: La luz de la esperanza. Aunque es un juego un poco simplón, según se ven por las críticas. Aún no lo hemos jugado en la web, así que no podemos decirlo de primera mano. Este está para PlayStation 4 y Nintendo Switch.
También tenéis Story of Seasons. Este juego es un Harvest Moon, pero como os digo, tuvo problemas de nombres por licencias. Su jugabilidad es la misma que los juegos de la saga, así que no le echéis cuenta al título. Este lo encontraréis en Nintendo 3DS. Hay un nuevo juego, Trio of Towns, pero no ha salido en Europa.
Si preferís iros a los Rune Factory, tenéis que ir un poco más al pasado. El último, para Nintendo 3DS, salió en 2012 y es Rune Factory 4. Pero tampoco es un dechado de virtudes.
Es curioso como indies recién nacidos e incluso estudios de una sola persona son capaces de despertar más interés que los que llevan mucho tiempo trabajando en esto.
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[column size=one_half position=last ]Contras
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Pese a que estos son los más carismáticos ahora mismo del lugar, hay otros títulos que bien merecen tu atención.
No vamos a entrar en profundidad en ellos porque no se centran tanto en los life simulator de este estilo. Pero bueno. Aquí están para los que prefieren otros enfoques.
No podemos irnos sin hacer una mención especial a Los Sims. No se trata de un juego de granjas, pero sí es un simulador social.
Aquí prima la personalización de nuestra casa y nuestra vida. No entra en escena el trabajo ni la recolección. Así que, si buscas esto, este no es tu juego.
Eso sí, EA ha empezado a sacar demasiado su vena más saca cuartos con esta última entrega. Y la versión de móviles tampoco se libra de ello. Así que, tú mismo.
Yonder es un juego en el que prima más la exploración que la recolección. Se trata de un título muy adorable, donde todo es maravilloso y magnífico. No hay combates, como tales, pero sí que tendremos que enfrentarnos a malvados enemigos que hacen que la población esté triste.
Podremos manejar una mini granja con animales y cultivos. No es que sea lo más complejo, pero podremos darle al tajo.
Es un juego mucho más relajado que los anteriores y muy «alegre». Todo demasiado flower power y posiblemente aburre demasiado pronto. Pero por echarle un tiento, no pierdes nada.
Sin duda alguna, uno de los títulos revelación de Nintendo 3DS que sorprendió a propios y extraños. En este juego prima las relaciones sociales entre los personajes que nosotros mismos creamos.
La gracia está en que ellos hacen lo que quieren. Nosotros solo les ayudamos y damos un empujoncito cuando les hace falta. Les damos de comer, jugamos con ellos o les animamos a tener una cita con su enamorado o enamorada.
No hay recolección ni nada por el estilo. Podríamos decir que es lo opuesto a Animal Crossing en ese sentido. Y sí, podremos tener familia, hijos e incluso enviarlos a otras islas.
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