MotoGP 14 – Análisis PlayStation 4

Milestone vuelve a la carga con MotoGP 14 tras recuperar la licencia del Mundial de Motociclismo la temporada pasada y presentar un juego con luces y sombras, por desgracia demasiadas de estas últimas. Para este año, el del estreno de la nueva generación de consolas y el dominio de Marc Márquez, prueban fortuna también en PlayStation 4 con buen resultado, lanzando un juego con un nivel técnico aceptable sin más, pero con una gran cantidad de contenido para tener ocupados durante mucho tiempo a los fans del motor y las dos ruedas.

Al hablar algo más abajo de los aspectos técnicos, que seguramente sea donde más flojea MotoGP 14, lo principal a destacar de esta entrega son las mejoras introducidas en los aspectos jugables, que son varias y muy jugosas. Evidentemente, la primera y de la que hay que pasar más por encima es la solución de bugs, como aquel famoso que convertía las carreras en infinitas si se nos ocurría disputar un Gran Premio a vueltas reales. De ese tipo de cosas han aprendido bien en Milestone, con lo cual, no hay defectos graves que empañen la experiencia de juego.

Evidentemente, MotoGP 14 cuenta con la licencia oficial del mundial, con todo lo que eso conlleva, con lo que veremos los 18 circuitos (se echará de menos Laguna Seca, desaparecido de la competición desde esta temporada), equipos y pilotos que compiten en Moto3, Moto2 y MotoGP.

Sin embargo, la mejor noticia respecto a este tema es la inclusión de pilotos y equipos históricos, con lo que veremos a gente como Kevin Schwantz, Mick Doohan, Max Biaggi, Alex Crivillé… con los que no solo podremos correr en Grandes Premios, sino competir en desafíos ficticios que nos pondrán a lomos de algunas de las motos que han hecho historia a lo largo de los últimos años de competición.

Aún así, hay que darle un palito a Milestone porque hay ausencias importantes sobre todo en Moto3, como Alex Márquez o Efren Vázquez. Si aparecen en el juego, pero no como seleccionablescon el cartel de «Se necesita contenido desbloqueable». ¿Qué quiere decir esto? Esperemos que simplemente se refiera a que se avecina una actualización en forma de DLC… gratuito. Si no es así, se trataría sin duda de algo grave.

También podremos disputar desafíos reales con los pilotos actuales dentro del modo Evento Reales 2013, en los que repasaremos los grandes momentos que nos dejó la temporada pasada en forma de ya clásicos duelos Márquez vs Lorenzo, remontadas de Valentino Rossi, etc… Estos desafíos no son precisamente pocos y cuentan con el factor emoción que da el tratarse de situaciones límite en una carrera.

El modo Carrera es de nuevo protagonista. Al igual que en entregas anteriores, podremos disfrutar de nuestra propia carrera como piloto, comenzando por buscándonos un sitio en los peores equipos de Moto3 hasta alcanzar la categoría reina. La novedad es que podremos correr tantas temporadas como queramos, con lo que se salva aquella pega de años anteriores, en los que podíamos quedarnos a las puertas de la gloria, obligándonos a la retirada antes de poder ser campeones de Moto GP, por ejemplo.

A esto hay que sumarle el sistema de experiencia que incluye el juego, y que iremos aumentando conforme vayamos alcanzando logros y que servirá sobre todo para desbloquear una gran cantidad de contenido como imágenes, vídeos, pilotos, equipos y demás, y que por qué no decirlo, es algo ejemplar de lo que muchas franquicias deportivas podrían aprender, ya que supone un añadido muy atractivo para los aficionados. Imaginaos tener algo similar en un FIFA, un NBA 2K… Es como para sentir envidia, desde luego.

En lo que estamos de acuerdo es que en un juego de este tipo lo principal es el nivel de simulación, y MotoGP 14 goza de mucha fuerza en ese apartado, disponiendo de tres niveles distintos: estándar, semipro y pro, distinguiendo entre ellos en cosas como la activación simultánea de frenos, la posición del piloto y demás aspectos de la física que influyen en la dificultad, y que en nivel Pro es todo un reto. Por fortuna, la curva de dificultad es excelente, porque evidentemente, las motos de Moto3 y las de Moto GP distan mucho en cuanto a exigencia de manejo y conducción.

Todo esto se traduce en emoción máxima en las carreras, sobre todo si las disputamos a vueltas reales. La IA en niveles más altos es muy perra (más en carrera que en clasificaciones, donde no es difícil conseguir buenas posiciones) y basta el más mínimo error sobre el circuito, sin ser necesario que se trate de un accidente, para que nos lo hagan pagar caro y nos dejen atrás sin remordimientos. Correr 20 vueltas en cabeza de carrera durante 40 minutos y cagarla al final para perder 4 o 5 posiciones estoda una experiencia que hace que MotoGP 14 se convierta en el Dark Souls de los juegos de conducción. La comparación es extravagante, pero razonable.

Con todo esto, no puedo más que recomendar la compra de MotoGP 14 a cualquiera que le atraiga un poco el mundillo de las motos, y es que por fin parece que Milestone le ha cogido el punto de nuevo a la franquicia. Este año nos presentan un juego que aunque técnicamente le falte encontrar un puntillo de excelencia, sobre todo con la llegada de las nuevas consolas (aunque no lo veamos en Xbox One), jugablemente alcanza un gran nivel en cuanto a simulación y desafío y muchísimo contenido fan service que sin duda el fan de las motos disfrutará a tope.

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