Estamos a tres días para del lanzamiento de Resident Evil VII y el hype está por las nubes, por eso es un buen momento para hacer un repaso a esta saga emblemática de Capcom, a la saga madre del survival horror. Aunque claro, para mí siempre es un buen momento para hablar de Resident Evil.
El año pasado se cumplió el 20 aniversario de la saga y Capcom parece dispuesto a hacernos un buen regalo por este aniversario. Han prometido volver a las raíces de la saga, al terror agobiante, a la escasez de munición y a los enemigos que de verdad nos da miedo encontrarnos.
Allá por 1996 Capcom lanzó el primer Resident Evil, para PlayStation, entre otras plataformas. Desde entonces esta franquicia nos ha traído muchos clásicos del videojuego, muchas perlas, aunque también muchas decepciones que no merece la pena desenterrar. Por ello os voy a dejar mi top 10 de Resident Evil, los que para mí han sido los mejores capítulos de la saga.
En 2012 llegaba a nuestras consolas un Resident Evil que tuvo que aterrizar en un terreno bastante difícil. Tras la decepción que supuso Resident Evil 5, la peor de las entregas numeradas, el sexto capítulo de la saga fue examinado rigurosamente y eso le paso factura, podríamos decir que, en parte, Resident Evil 6 pagó por los pecados de su predecesor.
Resident Evil 6 llevaba el argumento de la saga a una escala gigantesca, basada en el bioterrorismo a nivel mundial. El estilo de juego seguía los pasos de RE 5, pero con una mejoría notable. Los controles y la movilidad de los personajes se adaptaron a la acción frenética, dejando atrás el clásico sistema de “walk and run” que tuvimos en RE4 y RE5.
El juego nos ofrecía 3 modos campaña diferentes, cada uno con su historia y protagonistas propios, y que se entrelazaban entre sí en diferentes momentos de la aventura. Probablemente, este sea el punto fuerte del juego, la posibilidad de jugar varias campañas sobre una misma historia le da al juego mucha variedad. Los escenarios, los enemigos y el estilo de juego varía mucho entre cada una de las campañas. Además, también aumenta considerablemente la duración del juego.
Pero no son solo flores lo que le van a caer a Resident Evil 6 de mi parte. Como puntos negativos se podrían destacar los diálogos, que en algunos momentos son penosos, y el apartado gráfico de los escenarios, que flojea un poco si lo comparamos con los personajes.
En conclusión, Resident Evil 6 es buen juego que nos trajo de vuelta a los zombis de toda la vida, aunque se quedó en un intento de regreso a las raíces. Tiene sus más y sus menos, y no es, ni de lejos uno de los mejores Resident Evil, es lo suficientemente bueno para entrar en este top 10 por los pelos.
Lo mejor: la duración, la variedad y la carga emotiva que conlleva el reencuentro y la reaparición de personajes clásicos de la saga.
Lo peor: demasiada acción, los diálogos y el poco cuidado de muchos aspectos del apartado gráfico.
Valoración personal: 7.5 / 10
Hace apenas dos añitos Capcom lanzó la segunda entrega de los spin-off’s Revelations. Tanto Revelations como Revelations 2 se caracterizaban por dar una ligera vuelta de tuerca hacia el survival y el terror respecto a los últimos capítulos de la saga numerada.
Resident Evil: Revelations 2 me conquistó por su historia y su hilo argumental que, desde mi punto de vista, engancha mucho más que los argumentos de las últimas entregas de la saga numerada. La historia oscura, misteriosa, y alejada de la guerra biológica a gran escala que nos planteaban en RE 5 y RE 6, me cautivó desde un primer momento, casi me obligaba a seguir jugando para descubrir que venía a continuación.
El planteamiento se basaba en controlar a dos parejas de personajes cuyas aventuras se desarrollaban de manera independiente y cuyos capítulos se iban intercalando. De esta manera, cuando acabábamos un capítulo pasábamos a controlar a la otra pareja de personajes, dejando la trama de los anteriores en suspensión y alargando el misterio y la intriga. Todo esto hacía que el juego nos transmitiera la misma sensación que una serie de televisión, que nos mantuviera en ascuas constantemente.
Con protagonistas clásicos como Claire Redfield y Barry Burton conseguían ese toque mágico de nostalgia para conquistar a los fans de la saga. Por otro lado, la introducción de otros personajes nuevos y, sobre todo, de una nueva y original villana, hacían el argumento del juego muy atractivo e interesante.
La villana principal del juego, Alex Wesker, es uno de los principales atractivos en la historia. De entrada, el apellido Wesker ya es suficiente para ponernos la mosca detrás de la oreja. Por otra parte, descubrir su oscura y retorcida historia, y su relación con una de las protagonistas hizo que me enamorara de este villano y que se ganará un hueco especial en mi corazoncito de jugón.
Lo mejor: La historia, la narrativa y el hilo argumental me parecen sobresalientes, además, la manera de contarlo como si tratara de una serie de televisión nos hace engancharnos mucho más.
Lo peor: El doblaje al español, algún que otro bug de vez en cuando y movimientos de cámara un poco bruscos.
Valoración personal: 7.7 / 10
Damos un gran salto al pasado, a los tiempos de PlayStation 2, para hablar de un Resident Evil poco convencional, Resident Evil: Outbreak.
En 2003 llegaba Resident Evil Outbreak, el primero de dos Spin Off con el mismo nombre, y centrados en un estilo de juego enfocado hacia la verdadera supervivencia y el multijugador online, pero claro, en los tiempos de PS2 el juego online a través de las consolas no tenía demasiado peso.
El principal motivo que lleva a RE: Outbreak a este puesto es la verdadera sensación de supervivencia que transmite. Es, sin duda alguna, el Resident Evil más exigente en cuanto a dificultad.
En primer lugar, teníamos que compartir los recursos de cada nivel con otros dos personajes que nos acompañaban. Por otro lado, el inventario era en tiempo real, lo que nos dificultaba mucho las cosas, ya que el tiempo era un factor clave en RE: Outbreak.
¿Por qué era el tiempo importante? Pues por una sencilla razón, el medidor de infección. Sí, en esta entrega teníamos que vigilar la cantidad de infección vírica en sangre de nuestro personaje. Lógicamente, si este indicador llegaba al 100% moríamos. Disponíamos de una serie de medicinas especiales para frenar el avance del virus, ralentizarlo o incluso revertirlo.
Pero esta no es la única razón que convierte a esta entrega en la más difícil de la saga. Además del virus tendríamos que enfrentarnos a enemigos más duros, rápidos y mortíferos de lo que estábamos acostumbrados en entregas anteriores. El inventario es mucho más limitado, así como la munición y los objetos curativos.
Otra de las principales características de RE: Outbreak es la cantidad de personajes jugables que nos da a elegir, ocho concretamente. Cada uno de ellos dispone de diferentes habilidades y objetos especiales, desde ganzúas y mochilas de mayor tamaño hasta pistolas especiales. Y por si no fuera suficiente tenemos una gran cantidad de contenido desbloqueable, decenas de personajes y más.
Lo mejor: Una verdadera experiencia de supervivencia, la cantidad de personajes y la dificultad.
Lo peor: Su división por niveles, los desesperantes tiempos de carga y su duración, algo escasa.
Valoración personal: 7.7 / 10
Año 2002, llegaba a nuestras Gamecubes el último Resident Evil de pura cepa, y llegaba en un tren cargado de zombis y sabor a la vieja escuela.
Resident Evil 0 nos contaba los acontecimientos que tuvieron lugar inmediatamente antes de lo ocurrido en el primer Resident Evil y que, obviamente, están directamente relacionados con el resto de la trama y fueron uno de los desencadenantes de la tragedia vírica que alimenta a la saga.
La trama del juego profundiza en los orígenes de la corporación Umbrella, en la vida de sus padres fundadores y en los primeros experimentos realizados por la «angelical» compañía. Como en todo buen Resident, el escenario principal en el que se desarrolla la aventura es una gran mansión, una mansión laberíntica y llena de puertas cerradas que tendríamos que ir desbloqueando poco a poco. No faltará el típico laboratorio y las instalaciones secretas.
Con Rebbeca Chambers y Billy Cohen como protagonistas, Resident Evil 0 era el primero en el que los dos protagonistas avanzarían juntos durante todo el juego, necesitando el uno del otro para poder avanzar y superar diferentes dificultades.
Esta característica es una de las pocas que lo diferencia del resto de Resident clásicos, la posibilidad de alternar entre ambos personajes y de intercambiar objetos entre ellos. Esto ampliaba la capacidad de nuestro inventario, ya que disponíamos de dos inventarios.
Hablando de la capacidad para llevar objetos, hay que destacar otra de las diferencias de esta entrega con el resto de la saga, la ausencia de baúles para almacenar objetos. En su lugar podíamos dejar objetos en cualquier parte del escenario y volver a recogerlo cuando lo necesitáramos, con la cantidad de viajecitos que ello conlleva.
Exceptuando estas diferencias, a nivel jugable, Resident Evil 0 es un RE clásico en todos los aspectos. El sistema de control, de combate, los gráficos prerenderizados, el sistema de guardado…prácticamente todo se mantiene fiel a la saga.
Para ir acabando con esta entrega de la saga tengo que decir que es, sin duda, uno de los imprescindibles, tanto a nivel de jugabilidad como argumental, ya que arroja luz sobre el origen de la trama que sigue el resto de la saga numerada.
Lo mejor: Es un Resident Evil de los de verdad, los escenarios son una autentica pasada, tanto a nivel gráfico como en su estructuración.
Lo peor: La ausencia de baúles de almacenamiento y un enemigo final sin demasiado carisma, un poco ñeh.
Valoración personal: 8 / 10
En 1996 nació el mal, en 1996 nació Resident Evil, el inicio del género survival horror. El equipo S.T.A.R.S llegaba a la mansión de las montañas Arklay para investigar unos extraños asesinatos, sin imaginarse todo lo que había detrás de ellos.
Resident Evil sentó las bases de un género, unas bases que se mantendrían en la saga hasta Resident Evil 0. Durante la aventura tendríamos que recorrer una enorme mansión que se convertiría en otra de las señas de identidad de la saga.
Uno de los principales rasgos de Resident Evil es su desarrollo no lineal, en lugar de avanzar a través de niveles y escenarios continuos nos moveríamos por un escenario cerrado en el tendríamos que dar muchos viajes y salvar muchos obstáculos para poder avanzar.
En el inicio del juego la mayor parte de la mansión estaba bloqueada por puertas cerradas. Tendríamos que rebuscar cada rincón del edificio para encontrar llaves y otros objetos que nos permitieran desbloquear nuevas áreas del mapa. Además, como se hizo habitual en la saga, tendríamos que resolver cantidad de puzles y acertijos. Todo esto mientras nos enfrentábamos a zombis y otras criaturas con una reserva muy escasa de armas y munición.
En ciertas partes de la aventura saltaríamos entre los tres grandes escenarios del juego, la mansión, la casa de invitados y el laboratorio subterráneo, eso sí, siempre cabría la posibilidad de retornar al anterior, y en muchas ocasiones no era solo una posibilidad sino una necesidad.
El estilo de cámaras, control y sistema de combate también fue un antes y un después, al igual que los gráficos prerenderizados, utilizados con gran acierto para dar un nivel de detalle que, en esa época, hubiera sido imposible de otra manera.
En mi caso, no puedo hablar de este juego sin sentir que es, y será siempre, uno de los grandes videojuegos de la historia, un referente, y el padre de todo un género. Una joyita que todo jugón debe probar una vez en la vida. Larga vida a Resident Evil.
Lo mejor: La combinación de aventura, puzles y acción, la atmósfera de tensión constante que consiguió transmitir y la sensación de lucha por la supervivencia.
Lo peor: Su duración, como casi todos los RE clásicos peca de brevedad. De resto no veo nada más que reprocharle, sinceramente.
Valoración personal: 8.2 / 10
Claire y Chris Redfield regresaron en el año 2000 con Resident Evil: Code Veronica, el sucesor de Resident Evil 3. A pesar de no tratarse de una entrega numerada estrictamente, RE: Code Veronica tampoco puede considerarse un Spin-Off, ya que sigue el hilo argumental principal de la saga.
Esta entrega, que originalmente vio la luz en Dreamcast y más tarde en PlayStation 2, mantuvo el estilo de juego de la saga en la mayoría de aspectos, aunque también introdujo algunos cambios notables.
En primer lugar, se sustituyeron los gráficos prerenderizados y las cámaras fijas, aunque no dieron el salto a la cámara libre por completo, sino que mantuvieron un estilo híbrido, muy similar al Dino Crisis original, pero con algo más de movilidad.
Dejando a un lado estas diferencias, Resident Evil: Code Veronica mantuvo muy vivito el espíritu de la saga, incluso me atrevería a decir que se internó aún más en la exploración, la resolución de acertijos y la investigación que sus predecesores. Nos planteaba obstáculos de manera constante, entre otras cosas tendríamos que resolver puzles, buscar llaves u otros objetos clave, e incluso descender a las profundidades submarinas para llegar al origen de la trama.
Hablando de la trama de RE: CODE VERONICA, esta gira en torno a la familia Ashford y su relación con el cansino de Albert Wesker y la corporación Umbrella. Como pasa con RE: Revelations 2, en esta entrega la trama es el principal aliciente del juego.
Todo gira en torno a la misteriosa familia Ashford, la cual vive en una gigantesca mansión (qué raro una mansión en Residen Evil) en una pequeña isla, aislada del resto del mundo. Esta familia oculta una buena cantidad de secretillos oscuros, pero no como los de cualquier familia, si no del tipo “experimentos con virus en laboratorios secretos”. A medida que avanzamos se hacen evidentes las conexiones entre los Ashford y Umbrella, además de que van saliendo a la luz los oscuros secretos y experimentos que la familia ha realizado a nivel interno.
Para mí, el punto más interesante de la trama es la misteriosa relación fraternal entre los hermanos Alex y Alexia Ashford, aunque no diré nada más por si acaso no lo hayáis jugado nunca y tengáis pensado hacerlo, pero os dará una buena sorpresita.
Lo mejor: La historia que, además de contarnos lo típico sobre Umbrela y los virus, ahonda en la trama de los Ashford, que es muy, pero que muy interesante. Además, su duración es muy superior a lo que nos tenían acostumbrado las entregas anteriores.
Lo peor: El abandono de los gráficos prerenderizados que le hace perder cierto encanto, de resto no le veo más peros.
Valoración personal: 8.7 / 10
4 – Resident Evil 4, detrás de ti, imbécil.
Con Resident Evil 4 llegó un nuevo estilo de juego a la saga, un estilo que, de entrada, sentó muy bien, pero que a la larga hizo mucho daño a la franquicia Pero ese no es el tema, ahora toca hablar de Resident Evil 4 y los simpáticos ganados.
Corría el año 2004 cuando el agente Leon Scott Kennedy llega a un pueblo de la España más profunda con la misión de rescatar a la hija del presidente de Estados Unidos. Nuestros enemigos, por primera vez en la saga, no eran zombis, sino ganados. Los ganados son humanos infectados con un extraño virus conocido como “Las plagas” que les lleva a comportarse de manera violenta y, a la larga, a mutar de diferentes maneras.
A medida que avanzamos en la aventura los enemigos evolucionan, desde simples campesinos armados con hoces y hachas, hasta mutaciones aberrantes y criaturas de pesadilla. Además, avanzaremos a lo largo de tres grandes escenarios bastante diferentes entre sí, un pueblo rural y sus alrededores, una gigantesca catedral y sus mazmorras, y por último, una base militar en una isla.
El estilo de juego se centró de lleno en la acción y la exploración lineal. Teníamos a nuestra disposición un extenso y variado arsenal, y cantidades ingentes de munición. Para adecuarse a esto, la cantidad de enemigos a los que teníamos que enfrentarnos también se multiplicó.
La cámara pasó a situarse detrás de nuestro personaje, dejando atrás las típicas cámaras fijas de la saga. Los controles también se adaptaron al cambio, aunque con algunas carencias importantes. Por ejemplo, se mantuvo el sistema de movimiento walk & run típico de la saga, lo que nos entorpecía en numerosas ocasiones, sobre todo en el combate.
Esta entrega supuso un antes y un después, y no solo para la saga Resident Evil, sino para el género de acción en general, ya que sentó algunas bases y mecánicas, como el tipo de cámara que os comentaba más arriba, la “cámara al hombro”.
Lo mejor: El desarrollo, a pesar de ser lineal, está muy bien conseguido y nos mantiene enganchados, además, es muy rejugable. Por otro lado, hay que destacar el diseño de niveles y enemigos.
Lo peor: Las carencias del sistema de control para tratarse de un juego de acción.
Valoración personal: 9 / 10
La tercera entrega de la saga numerada llegó en 1999 para revivir la magia que creó Resident Evil 2, para volver a las calles arrasadas de Raccoon City y presentarnos a un personaje muy especial, atento y cariñoso. Su nombre es Némesis.
Con una mecánica de juego prácticamente igual a la de su predecesor, RE 3 nos llevaba de nuevo a las calles de Raccoon, centrándose en escenarios exteriores y más variados que los de RE 2. Los sucesos tienen lugar prácticamente al mismo tiempo que lo ocurrido en la entrega anterior, y nos ayuda a entender mejor la desgracia que asoló la emblemática ciudad.
Nuestra protagonista, Jill Valentine, debe enfrentarse a hordas de zombis mientras recorre la ciudad con la intención de escapar y salvarse del inminente ataque nuclear que Umbrella lanzará sobre la misma para borrar el rastro del virus. Además, nos perseguiría uno de los enemigos más icónicos de toda la saga, Némesis, quien nos haría pasarlo mal en varias ocasiones y llevarnos unos cuantos sustitos.
Némesis es una aberración creada por Umbrella y destinada para acabar con los miembros de S.T.A.R.S, el cuerpo de élite de la policía de Raccoon. En los distintos encuentros que tendremos con él nos enfrentaremos a diferentes decisiones que cambiaran ligeramente el rumbo de la aventura. Además, no importa cuánto plomo le metamos en el cuerpo, no podremos derrotarle de verdad hasta el final del juego, como mucho mandarlo a dormir la siesta.
Las razones que llevan a RE3 a un puesto tan elevado de este ranking son de diferente índole. Por un lado, mantiene la esencia de la saga a la perfección, la exploración, el survival y la resolución de puzles, pero no solo la mantiene, sino que la expande y perfecciona. Además, la variedad de escenarios respecto a RE 2 le sienta genial, y por último su intensidad a nivel de jugabilidad y narrativa es impresionante.
En resumen, RE3 adoptó las virtudes de Resident Evil 2 y añadió nuevos elementos, una mayor sensación de lucha por la supervivencia, gracias a Némesis, y una variedad de entornos mucho mayor.
Lo mejor: Mantiene el espíritu de la saga, añade intensidad y variedad de escenarios.
Lo peor: La corta duración, al igual que las dos entregas restantes en el ranking, si duraran unas horas más serían perfectas.
Valoración personal: 9.5 / 10
2 – Resident Evil 1 (2002 remake), el retorno del terror original
Capcom nos hacía un auténtico regalazo a todos los fans en 2002. En este año llegó una joyita que todo fan de la saga debería tener como oro en paño. El remake del Resident Evil original lo hizo tan bién que se ha ganado el 2º puesto en mi ranking de Resident Evil.
Manteniendo la esencia básica del original consiguió añadir innovaciones a nivel jugable que le sentaron de maravilla. Nuevos escenarios para ampliar la duración de la aventura y un apartado gráfico sublime que, en el año en el que vio la luz, nos dejó boquiabiertos. El realismo de sus texturas, unido a sus escenarios envejecidos y oscuros nos sumergía en una experiencia realmente aterradora.
Otro añadido importante fueron los zombis «crimson head». Al llegar a cierto punto de la aventura, los cadáveres de los zombis que habíamos eliminado hasta el momento volvían a la vida siendo mucho más rápidos, agresivos y duros de pelar, e incluso abrían puertas para perseguirnos. Nos darían unos cuantos sustos y nos harían pasar muchos nervios. La unica forma de matarlos definitivamente era reventarles la cabeza o prenderles fuego.
Todos estos cambios se introdujeron sin renunciar a los gráficos prerendirazados, las cámaras fijas o el sistema clásico de control y combate. La aventura, a grandes rasgos, era la misma pero con añadidos interesantes entre los que destaca la historia de Lisa Trevor (que no voy a desvelar para no spoilear a aquellos que no lo hayan jugado) y su correspondientes escenarios.
Sin duda, este remake hizo honor al título original y lo elevó al lugar que se merece ocupar como padre de los survival horror y de la saga Resident Evil.
Lo mejor: El apartado gráfico, la fidelidad al juego original y los añadidos argumentales.
Lo peor: Como con muchos Resident, la única pena que nos queda es que podrían ser un poco más largos.
Valoración personal: 9.7 / 10
El incidente del Virus – T llegaba a las calles de Raccoon City en 1998, convirtiendo la ciudad en un infierno de muertos vivientes. Leon S. Kennedy y Claire Redfield son los encargados de hacer frente a la infección que escapó de las instalaciones del primer RE en las montañas Arklay, encontrar su origen y tratar de salir con vida de la ciudad.
Lo que hace tan especial a Resident Evil 2, hasta el punto de ser la entrega más aclamada por los fans, es la maestría con la que Hideki Kamiya y Shinji Mikami trasladaron el espíritu de su predecesor de la mansión de Arklay a las calles de Raccoon City, la comisaría o el laboratorio de Umbrella.
Esta entrega caló muy hondo en el corazón de los fans, la sensación que experimentamos al recorrer la comisaría de policía en busca de llaves y resolviendo acertijos para poder avanzar es realmente única, mágica. Resident Evil 2 logró una combinación casi perfecta entre acción, exploración y survival, y dejó este legado a entregas posteriores, sobre todo a Resident Evil 3. Por ello, aunque RE3 enriqueciera aún más esta mecánica, se lo debe a RE2, y esta es otra de las razones que lo llevan al primer puesto.
En esta aventura tendríamos que abrirnos paso por dos escenarios principales, la comisaría de policía de Raccoon y los laboratorios de Umbrella. Tendríamos que descubrir el origen de la tragedia al tiempo que luchábamos por salir con vida de la ciudad. Por el camino nos encontraríamos con personajes emblemáticos de la saga como Ada Wong o Sherry Birkin, dependiendo del personaje que eligiéramos.
Como ocurría en Resident Evil 1, dependiendo del personaje que eligiéramos, Leon o Claire, la aventura tomaría un rumbo diferente. Tendríamos que enfrentarnos a diferentes enemigos y recorrer escenarios ligeramente diferentes.
Otro de los grandes encantos de este juego, al menos para mí, es su enemigo final, Tyrant. Aunque ya habíamos visto una de sus versiones en RE1, el Tyrant de RE2 es el mejor de ellos con mucha diferencia. A lo largo del juego le veríamos transformarse en multitud de formas, desde un humanoide con algunos restos del científico que una vez fue hasta una bestia deforme que nos atacaba a bordo de un tren, justo en el final del juego.
Resident Evil 2 es, para mí, el mejor Resident Evil hasta la fecha y espero que su ansiado remake le haga justicia de la manera que el remake de RE1 lo hizo con el original. Dándole la gloria que se merece sin perder su esencia.
Lo mejor: La ambientación, la combinación de acción y aventura, y esa esencia única de survival horror.
Lo peor: La duración, como los anteriores.
Valoración personal: 10 / 10
Aquí acaba el Top 10 de Resident Evil, culpables, a unos pocos días de que salga a la venta el esperado Resident Evil VII, y es un buen momento para hacer un repaso de toda la saga. ¿Conseguirá la séptima entrega numerada ganarse un puesto en un futuro Top 10?
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